Te invito a la soledad que me rodea, ven, juega un rato con nosotros.
Ven a mi vacío y déjalo como está, es mi soledad quien me acompaña siempre.

No poder decir palabras, no poder decir palabras.
Por qué tu piel es mentira en mi cuerpo.

Los pétalos solos,
solo flotan en el agua.

Dónde guardo los llantos que no fueron.
Dónde los escondo.

Si ya no existen
por qué pesan igual.

Y faltan palabras,
tantas palabras.
Demasiados gestos de amor,
quisieran ser amor.

Demasiados gestos de amor,
quisieran ser amor.
Y mis palabras que no son palabras.

SEG: La realidad nos ha olvidado y lo malo es que uno no se muere de eso.
CAR: Ya no existe la realidad. 
SEG: Sin embargo cumplimos años, perdemos la frescura, las ganas... Perdemos... Car, ¿no es eso la realidad?
CAR: Entonces la realidad no nos ha olvidado.
SEG: ¿Y por qué decís que ya no existe?
CAR: ¿Puede darse algo más triste que esta conversación?
SEG: Quizás es triste porque no hacemos nada.
CAR: No hacemos nada pero lo hacemos mal.

Alejandra Pizarnik - Los perturbados entre lilas

Mi cuerpo

Sepultura de lo que soy

Mi cuerpo

Mentiras que ves.

Mis ojos

Llamados que no existen.

Hoy dos sombras me pertenecen
La que mi cuerpo proyecta
La que tu cuerpo abandonó

Hoy dos sombras me pertenecen...
Pero no hay sombras en la luz.

Ya elegí las palabras que desearte.
Las que llenaran los vacíos
de cuando fuiste

Escapar sin huir.
Puñal a puñal hasta la última gota de sangre.
Abandonar mi cuerpo, mis cuerpos.
Abandonar los que fui, responsables del ahogo.
Dejar la sangre que siempre lleve.
Sufrir, llorar, sangrar.
Morder lo que fuimos y seremos.
Disfrutar la herida.

No comparto mis miedos,
ellos me cuidan frente a lo nuevo.

No me regales tus miedos,
ellos son palabras que matan.

Se libre... Se libre
Se tan libre
que pueda encontrarte en todas las cosas.
En todos los lugares.
En todas tus personas.

Soñar con estrellas
y que tus ojos lo sean.

Qué tan lejos estoy.